miércoles, 18 de marzo de 2015

Las iglesias y el matrimonio igualitario

Desde hace algunos años varias denominaciones de diversas religiones han abierto sus altares al matrimonio igualitario.

Así las cosas, bienvenidos todos los que quieran apoyar nuestra lucha, pero no olvidemos que nuestro campo es el derecho y no el religioso.
¿Las razones? Están las que con una real intención de salvaguardar los derechos de todos y todas reconocen el sacramento matrimonial a quienes así lo soliciten. También están las que lo hacen simplemente para mantener y obtener adeptos y así no perder su franquicia religiosa.

Países como Puerto Rico, donde las iglesias disfrutan de una cantidad absurda de beneficios que el resto de la sociedad jamás tendrá, sirven de cuna para el extremismo religioso. Estos "sepulcros blanqueados" son los dinosaurios dentro de la amalgama de líderes e ideas religiosas. Son estos "fariseos" como los de la historia bíblica en Mateo 23: 4: "Porque atan cargas pesadas y difíciles de llevar, y las ponen sobre los hombros de los hombres; pero ellos ni con un dedo quieren moverlas." Son estos los que con su retórica de odio se han convertido en un lastre para el adelanto social, económico y en materia de derechos humanos entre otros aspectos.

Ahora bien, si alguna denominación quiere apoyar el matrimonio igualitario, bien por ella. Y es ella la que tiene que rendir cuentas a sus miembros sobre sus acciones. Pero esas movidas religiosas no son vinculantes a nuestra lucha ya que nuestra lucha no está amarrada a religión alguna. Nuestro movimiento busca reivindicar nuestros derechos en el campo del derecho y no en el de la fe.

Queremos que sea el Estado el que reconozca nuestros derechos a ser felices con quien nuestro sentimientos nos dicten y no con quienes un grupo cree que debemos estar. Queremos que sea el Estado, guiado por los más básicos derechos y libertades democráticas, quien cumpliendo con su deber ministerial de velar por la igual protección de las leyes establezca como política publica el que todos y todas podamos contraer matrimonio civil.