El ICP tiene una Junta de Gobierno que lleva las riendas del mismo y acoge
la recomendación del gobernador para el puesto e directo o directora de dicha
agencia quien será la cara visible de la gesta cultural del ICP.
Ayer el ciudadano gobernador, Alejandro García Padilla, comunicó al
país quienes serán sus propulsores culturales desde el ICP. A la vez firmo la
Orden Ejecutiva que crea la Comisión para el Desarrollo de la Cultura de
Puerto Rico.
Si bien es cierto que el ICP necesita más y variadas
herramientas (como podría ser la mencionada comisión) para llevar a cabo su
labor de manera eficaz y responsable, no solo para con el país
sino para con nuestro patrimonio cultural, también es cierto que dichas
herramientas tienen que presentarse con la responsabilidad que amerita el tema.
Hay varios aspectos que creo deben ser considerados
sobre los anuncios hechos ayer por el
gobernador:
1. No pongo en duda la capacidad intelectual y la entrega
del sacerdote Ángel Darío Carrero a lo que él entiende como cultura
puertorriqueña pero me resulta preocupante que se nombre a un líder religioso
como presidente de una comisión, que aún cuando fue creada por Orden Ejecutiva
y no por fuerza de ley, es un organismo gubernamental y no podemos olvidar la constitucional
separación de iglesia y estado. Otra cosa, el sacerdote al momento de hacer sus
votos franciscanos juró TOTAL LEALTAD al Papa y a la Iglesia Católica Apostólica
y Romana, no al estado laico en el cual vivimos. Si a esto le sumamos que también
será parte de la junta de gobierno del ICP la problemática se agrava. No pretendo que García Padilla nombre a un
ateo; pero creo que con nombrar un laico es más que suficiente.
2. No podemos ver la cultura como un mecanismo de generar
riqueza. Estamos hablando de lo que somos, de dónde venimos y adonde querremos
ir cultural, social e históricamente hablando. Si vamos a hablar de dinero que sea para
anunciar más fondos a las entidades culturales del país, tanto las públicas
como las privadas pero no para ver la cultura como una máquina de hacer dinero.
3. No veo a una sola persona negra en dicha comisión. Con
esto no quiero decir que el oficialismo esté discriminando contra las personas
negras, porque no es cierto. Solo digo que hasta el propio logo del ICP tiene
la imagen de un taíno, un blanco (español) y un negro (africano) esto gracias a
que estas tres razas hicieron al puertorriqueño que somos hoy y entiendo que si
querernos promover realmente nuestras raíces debemos tener una comisión cultural
tan diversa como sea posible.
Expongo todo esto porque el
propio gobernador dijo que la Comisión estaba abierta a recibir el insumo de todos
y todas a fin de llevar a buen término su función. Aquí les dejo al menos tres
de mis preocupaciones.